sábado, 7 de julio de 2012

COCOCHAS DE BACALAO EN SALSA VERDE


¡¡Que día más extraño!! Lo que prometía ser un día feliz hace un mes, ha quedado reducido a una sensación de tristeza y a un "no parar" de pensar que me estoy perdiendo algo muy importante y que no se como recuperarlo, que es la infancia de mi pequeña, tengo tanto tiempo que dedicar a mi madre que me estoy olvidando que mi peque solo va a ser niña una vez y yo no lo estoy disfrutando.

Hoy estaba de boda, una boda a la que me hacia muchisima ilusión ir porque era de un primo al que quiero un montón, pero como mi madre todavía no anda muy allá, bueno, ni muy allá, ni muy acá.. sino todo lo contrario, pues solo he podido ir a un rato a la comida. Está bien, no me quejaré, menos da una piedra y además me ha servido de distracción y bueno, para lo típico, besicos por aquí, más besicos, más ¡¡qué mona estás hoy!! Que no digo yo que no se agradezca, pero yo pienso: ¡¡si siempre voy monisima!! jajajaj, bueno, es una tontería mia, sienta muy bien que de vez en cuando te digan esas cosas. Pero cuando iba a empezar lo mejor, el baile, que es cuando mi hija iba a estar más graciosa y se lo iba a pasar fenomenal, me tuve que ir.. y si tengo que ser sincera, me he sentido fatal. Creo que ella ya no cuenta con mi presencia en ningún momento, aunque si entiende el por qué.

y bueno, voy a dejar el psicoanalisis, porque este pretende ser un blog de cocina, sencillo, pero eso, de cocina y no "El diario de Magdalena".

Como tenía que hacer comida para ella y para mi suegra y no son muy amigas de la carne, me puse a rebuscar en el congelador, que dicho sea de paso, esta como mi mesa de trabajo cuando trabajaba.. nunca sé donde pongo nada, así que suele haber de todo, pero yo sin saberlo.

Y rebuscando, rebuscando, me encuentro un paquete de cocochas de bacalao, perfecta comida para las dos jubiladas de la familia... 

Y manos a la obra

Ingredientes

1 kl de cocochas de bacalao
harina y huevo para rebozar
1/2 vasito de vino blanco
Aceite de oliva virgen 
Ajo, perejil (sal no, porque suelen venir en su punto de sal)


1.- Las mias vienen limpias y  preparadas, los que no tengan esa suerte, pues venga, a limpiar...

2.- Aceite de oliva virgen en una sartén, las pasamos por harina y huevo y las vamos rebozando, cuando estén doraditas, a una cazuela más bien baja.

3.- Cuando estén todas, quitamos parte de ese aceite de la sartén, yo dejo muy poquito y doramos una cucharada de harina. Antes, hacemos un majado de ajo y perejil , y cuando la harina esté dorada, lo añadimos a la sartén junto con el vino blanco y un poco de agua.

4.- Dejamos que se haga la salsa para que se una durante diez minutos y la echamos por encima de las cocochas.

5.- Las ponemos a cocer otros quince minutos y ya están. Rectificamos de sal si hace falta y seguro que si las probáis os va a encantar.. 

El resultado mio fue que mi madre que come muy poquito se comió cuatro, que eso, en estas circunstancias es un exito y mi suegra repitió, algo sumamente EXTRAÑO.




13 comentarios:

  1. Tienen una pinta rica, rica y seguro que ellas te lo agradecieron.

    Mira que es complicada la vida, por un lado tu sentido como hija y por el otro como madre.

    Besitos

    ResponderEliminar
  2. Hola Mada, nunca las he preparado a ver si me animo porque tienen un aspecto buenísimo! Ánimo con la dificil situación en la que te encuentras, aunque estoy segura de que tu hija lo entiende perfectamente, como bien dices, y eso es muyyy importante! Un besazo

    ResponderEliminar
  3. HOla Magda, fantástica receta, me la apunto. No sirvo mucho para dar consejos, francamente, pero creo que no debes sentirte mal. Hay tantos momentos de nuestros peques que nos perdemos a lo largo del día y que asumimos con total normalidad, que debes pensar que, por ley de vida, te queda mucho menos que disfrutar de tu madre que de tu hija. Ya vendrán bodas, bautizos y comuniones y momentos que disfrutar con tu peque. No obstante, todo mi cariño y comprensión. Besitos.

    ResponderEliminar
  4. Hola, encantada de conocer tu blog, me quedo por aquí, tienes cositas muy interesantes. Un saludo.

    ResponderEliminar
  5. guapa! desahógate que el blog viene genial para estas cosas. todo no puede ser bueno en la vida y si escribiéndolo te sientes mejor pues ya está. mucho ánimo :)
    la receta rica rica, me está dando hambre ver las fotos.
    besazos!

    ResponderEliminar
  6. te entiendo perfectamente, ce la vie, ricas cocochas, besos!!

    ResponderEliminar
  7. hola Magda la vida es complicada, a veces o muchas veces pero es lo que toca, bueno la receta buenisima y estupenda me encanta un besito

    ResponderEliminar
  8. Buenas tardes Magda. Si importante es la comida, con su compra, preparación, elaboración..., más importante es tener comensales para los que cocinar. En tu caso, como en el mío, la madre nos ocupa un gran periodo de tiempo y a la vez están los hijos. No te agobies, porque lo que estás haciendo es educar a tu hija en amor hacia los demás. Qué bonito es ver a los niños con los abuelos, ayudándonos a cuidarlos. Eso es tan importante o más que la propia cocina. Claro que todo requiere esfuerzo y sobre todo renunciar a muchas cosas, pero esas renuncias se ofrecen por los demás. Ánimo que estamos contigo.
    Las cocochas tienen una pinta extraordinaria. No las he probado nunca pero me animaré a hacerlas.

    ResponderEliminar
  9. He encontrado tu blog y me ha gustado mucho con tu permiso me quedo por aquí,la vida es muy complicada, hay que disfrutar de cada momento.La receta muy rica esas cocochas.Besos.

    ResponderEliminar
  10. Me gusta mucho tu receta, sencilla y deliciosa!! Me quedo por aquí!!
    Besosss

    ResponderEliminar
  11. Entiendo tu situación, es bueno que te desahogues y así te sentirás mejor. Me gusta tu receta, pues el bacalao me encanta.Bss..

    ResponderEliminar
  12. Si te sirve de algo te diré que creo que estás dando un ejemplo impagable a tu hija, de amor , de responsabilidad y del sentido de la familia, cosa muy poco frecuente en estos tiempos.
    La mejor educación es el ejemplo y creo que es muy positivo que tu hija vea el sacrificio que a veces conlleva el amor por la familia y que aún así compensa.

    ResponderEliminar
  13. Hola cielo, me alegra un montón verte activa bloggeril jejeje, estas cocochas tienen una pinta buenísima yo hago la merluza muy parecida, por eso está muy rica.
    Venga anímate pero a tu ritmo, sin presiones.
    Un besote

    ResponderEliminar